En la calle 6 con carrera 7 del barrio Cálamo de Pitalito

La situación de los docentes y estudiantes de la Institución Educativa Normal Superior de Pitalito es alarmante. Los profesores denuncian que están obligados a impartir clases en condiciones inhumanas debido a la falta de infraestructura adecuada, la escasez de recursos y la negligencia de las autoridades locales, encabezadas por el alcalde y el secretario de Educación, Oscar Humberto Cuéllar Castro. De acuerdo con las denuncias, los estudiantes de esta institución no tienen pupitres suficientes, lo que los obliga a sentarse en sillas de plástico, como las sillas Rimax. Sin embargo, ni siquiera estas sillas son suficientes para todos, y los alumnos se ven obligados a sentarse en el suelo para poder recibir sus clases.
Este tipo de situaciones no son exclusivas de la Normal Superior de Pitalito. La precariedad de la infraestructura educativa se extiende a varias instituciones de la ciudad, lo que genera una gran preocupación entre la comunidad educativa y las autoridades locales. La falta de espacios adecuados para la enseñanza está afectando el proceso educativo de miles de jóvenes en Pitalito.
Crisis en la infraestructura
La infraestructura de las escuelas y colegios de Pitalito está en un estado crítico. Los techos de algunos salones están a punto de colapsar, las paredes se encuentran deterioradas y los baños no cumplen con las condiciones mínimas de higiene. Esta crisis no solo afecta la calidad educativa, sino también la seguridad de los estudiantes y docentes.
Además, la falta de recursos destinados a la mejora de la infraestructura educativa agrava aún más la situación. Según información de fuentes cercanas a las autoridades, los fondos que debían haberse invertido en 2024 para la reparación y mantenimiento de los colegios y escuelas en Pitalito no se han utilizado. Este dinero se encuentra guardado, mientras las instituciones siguen deteriorándose cada vez más.
Falta de acción de las autoridades
El desinterés de la Alcaldía de Pitalito y de la Secretaría de Educación es evidente, ya que, a pesar de las múltiples solicitudes y peticiones de la comunidad educativa, no se han tomado medidas para solucionar la crisis. Los docentes y estudiantes siguen luchando para impartir y recibir clases en condiciones que no son dignas para ninguna persona. Los padres de familia también están alzando su voz, exigiendo respuestas de las autoridades locales y regionales, quienes parecen más preocupados por otros asuntos que por la educación y el bienestar de los jóvenes de Pitalito.




