La situación que atraviesan los comerciantes del tramo ubicado entre el almacén Éxito y la Institución Educativa Ciudad de Ipiales, sobre la vía Panamericana, se ha convertido en una verdadera pesadilla. Lo que antes era un corredor comercial activo y dinámico, ahora enfrenta una crisis derivada del aumento de la inseguridad y la falta de control sobre el espacio público.
En los últimos meses, el sector ha visto la proliferación de cambuches improvisados levantados por habitantes de calle. Muchos de ellos consumen sustancias psicoactivas a plena luz del día, generando preocupación en estudiantes, trabajadores y clientes. Esta situación ha provocado un fuerte descenso en las ventas, al mismo tiempo que ha deteriorado la imagen urbana.
Los comerciantes afirman sentirse abandonados. Aunque reconocen los esfuerzos de la Policía Nacional e Iservi, aseguran que las acciones no han sido suficientes para devolver la tranquilidad. Las jornadas de limpieza se ven opacadas por el regreso constante de personas que no solo generan basura, sino que, en algunos casos, se tornan violentas con los operarios de aseo.
El presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Ipiales, Iván Flores, explicó que ya se están llevando a cabo reuniones con actores clave del sector. La meta es construir soluciones integrales que involucren a entidades públicas y privadas, buscando recuperar el orden y la confianza ciudadana.
Además, el sector enfrenta otro problema: la contaminación visual y auditiva provocada por algunos negocios. En su afán por atraer clientes, varios locales han incurrido en prácticas irregulares, como altavoces a todo volumen o carteles publicitarios invasivos, lo cual incumple la normativa municipal.
Edgar Alberto López Potosí, presidente de la Junta Directiva de la Cámara, respaldó el llamado al cumplimiento normativo y destacó la importancia de recuperar la competitividad local. Según López, Ipiales necesita ofrecer un entorno más atractivo si quiere evitar la fuga de compradores hacia ciudades como Pasto.
