La defensa del condenado Santiago Uribe Vélez cuestionó este martes los testimonios de cuatro exmiembros de grupos paramilitares que participaron en el proceso judicial en su contra, argumentando que las declaraciones carecen de credibilidad y estarían fundamentadas en versiones inconsistentes.
Según el abogado defensor, los relatos presentados durante el juicio corresponden a “testigos flojos”, que en su mayoría han sido vinculados con procesos de colaboración con la justicia y podrían haber recibido asesoría para estructurar sus testimonios —lo que habría viciado su valor probatorio.
Este cuestionamiento se da en el contexto de la reciente condena por el grupo paramilitar Los 12 Apóstoles, organización desmantelada que operó en los años 90 en el norte de Antioquia, por cuyo liderazgo Uribe Vélez fue sentenciado a 28 años de prisión tras ser hallado culpable de delitos como homicidio agravado, concierto para delinquir y crímenes de lesa humanidad.
Claves del argumento de la defensa
- La defensa sostiene que los testimonios en los que se basó buena parte de la condena presentan contradicciones internas, carecen de pruebas materiales que los respalden y fueron otorgados por individuos que actualmente se benefician de colaboración judicial.
- Además, alegan que las declaraciones han sido “confeccionadas” con asesoría externa, lo que cuestiona su veracidad y pone en duda la fortaleza del caso judicial.
Este escenario abre un nuevo frente en el caso, mientras algunos defensores de derechos humanos y representantes de víctimas alertan que revivir cuestionamientos podría reabrir heridas y generar inseguridad jurídica. Al mismo tiempo, la sentencia sigue vigente y la condena de 28 años contra Uribe Vélez se mantiene como un precedente en la jurisprudencia sobre paramilitarismo en Colombia.
