
Luisa Fernanda, afectada.
La tragedia golpeó nuevamente al barrio Santa Helena de Girardot. Según relató Luisa Fernanda, una de las damnificadas, en horas de la tarde del 21 de octubre un fuerte estruendo estremeció la zona. La vivienda, que presentaba serios daños estructurales y estaba a punto de colapsar, finalmente se desplomó ante la mirada impotente de los vecinos. Cuatro familias, más de veinte personas en total, entre ellas varios niños y adultos mayores, habían sido evacuadas previamente y permanecían en la vía pública bajo carpas improvisadas con algunos de sus enseres.
Hasta el lugar llegaron unidades del Cuerpo Oficial de Bomberos del municipio, quienes realizaron la evaluación de daños y verificaron el estado del terreno. Durante la inspección se estableció que otras ocho familias que habitan en la parte baja de la zona también tuvieron que ser evacuadas preventivamente, ante el inminente riesgo de un nuevo derrumbe. Estas personas, al igual que las primeras afectadas, quedaron sin un lugar donde resguardarse.
La situación se agrava con las fuertes lluvias que han caído en los últimos días sobre Girardot, aumentando el riesgo de nuevos deslizamientos y empeorando las condiciones de quienes hoy duermen a la intemperie. Las familias afectadas han expresado su preocupación y angustia, pues temen por su seguridad y la de sus hijos ante la falta de un techo digno.
Por ahora, los damnificados aseguran que solo han recibido ayuda mínima, consistente en un mercado y capas plásticas, mientras esperan una respuesta concreta por parte de la Alcaldía de Girardot.




