Dormilones profesionales
- Los gatos pueden dormir entre 12 y 16 horas al día, y algunos hasta 20 horas, porque son depredadores que necesitan conservar energía.
Bigotes muy sensibles
- Los bigotes no solo son decorativos: detectan corrientes de aire, ayudan a medir espacios y percibir movimientos, y avisan si caben en un lugar estrecho.
Ronroneo misterioso
- Aunque ronronear suele ser señal de felicidad, los gatos también lo hacen para calmarse o incluso curarse: investigaciones sugieren que frecuencias de 25 a 150 Hz promueven la regeneración de huesos y tejidos.
Super saltadores
- Pueden saltar hasta seis veces su altura, gracias a sus potentes músculos traseros y su flexibilidad.
Maestros de la higiene
- Pasan aproximadamente 30-50% de su día acicalándose, lo que ayuda a regular su temperatura, limpiar su pelaje y reducir estrés.
Gatos “habladores”
- No todos los gatos maúllan; la mayoría lo hace solo con los humanos. Es su forma de comunicarse con nosotros, no con otros gatos.
Visión nocturna impresionante
- Tienen 6 veces más receptores de luz que los humanos, lo que les permite ver muy bien en la oscuridad.
Nariz única
- La huella de su nariz es única como nuestra huella digital, cada gato tiene un patrón diferente.
Cola expresiva
- La posición y el movimiento de la cola comunica emociones:
- Cola erguida → felicidad/confianza
- Cola hinchada → miedo o amenaza
- Cola moviéndose lentamente → concentración o curiosidad
Gatos y agua
- Aunque muchos odian mojarse, algunas razas (como los Turco Van o Maine Coon) disfrutan nadar.
