La crisis de agua que atraviesa el municipio de Pitalito ha generado un creciente malestar entre los ciudadanos, que se sienten desprotegidos ante la falta de medidas eficaces para garantizar el suministro del servicio básico. El veedor Herminzul Atuesta, reconocido por su labor de control social, se pronunció enérgicamente contra la gestión de Empresas Públicas de Pitalito (Empitalito), a la que señala de actuar con negligencia.
“Deben rodar cabezas, debe haber sanciones. ¿Cómo es posible que Empitalito no tenga un plan de contingencia?”, cuestionó Atuesta, quien responsabiliza directamente a la entidad por no prever la situación que ha dejado sin agua a varios sectores del municipio. El veedor considera que la crisis no solo evidencia una falla operativa, sino también una falta de planeación institucional.
Movilización
Ante el silencio de la administración municipal y la falta de soluciones inmediatas, Atuesta convocó a un plantón ciudadano este viernes a las 9:00 a.m. frente a la sede de Empitalito. El objetivo, según explicó, es exigir explicaciones públicas sobre las causas reales de la emergencia, los responsables y las acciones que se están tomando para restablecer el servicio.
“Los laboyanos merecen respeto. No podemos seguir soportando la falta de agua mientras las autoridades se limitan a dar declaraciones sin resultados. Exigimos respuestas claras y sanciones ejemplares”, expresó el veedor.
La convocatoria ha generado respaldo en redes sociales, donde varios usuarios han manifestado su intención de asistir al plantón para reclamar por la continuidad y calidad del servicio público.
Exigen rendición de cuentas
Herminzul Atuesta insistió en que el problema no puede reducirse a una falla técnica, sino que debe abordarse como un tema de responsabilidad administrativa. Pidió a los organismos de control, como la Contraloría y la Procuraduría, intervenir de manera inmediata para investigar la omisión de Empitalito en la adopción de un plan de contingencia.
“Si no hay control ni sanciones, esto se repetirá. No puede ser que una empresa de servicios públicos opere sin protocolos para enfrentar emergencias”, puntualizó.
Mientras tanto, la comunidad laboyana espera respuestas oficiales y soluciones de fondo que eviten nuevos episodios de desabastecimiento. El reclamo del veedor resume el sentimiento de indignación ciudadana ante una crisis que, según él, “era perfectamente evitable si se hubiera gestionado con responsabilidad y transparencia”.


