El gobierno de Estados Unidos confirmó este viernes, a través de un mensaje oficial en su cuenta de X (@StateDept), que revocará la visa del presidente de Colombia, Gustavo Petro, luego de su intervención y participación en una manifestación pro-Palestina en Nueva York.
Durante esta jornada, Petro volvió a ser enfático en sus críticas contra las acciones de Israel en Gaza, a las que ha calificado reiteradamente como un “genocidio contra el pueblo palestino”. Su postura, una de las más fuertes dentro de la región latinoamericana, ha incomodado a Washington, que mantiene un respaldo abierto a Israel en el marco del conflicto.
En el pronunciamiento, el Departamento de Estado señaló que la decisión se toma “debido a las acciones imprudentes e incendiarias” del mandatario colombiano, a quien acusan de haber instado a soldados estadounidenses a desobedecer órdenes e incluso de incitar a la violencia. Sin embargo, en sectores políticos y de opinión se interpreta que la medida también responde al creciente distanciamiento de la Casa Blanca con el presidente Petro por su férrea defensa de la causa palestina.
Hasta el momento no se ha emitido un comunicado adicional en la página oficial del Departamento de Estado ni se conocen más detalles sobre los alcances concretos de la medida. Tampoco se ha especificado qué tipo de visa se revoca ni desde cuándo entrará en vigencia la restricción para el jefe de Estado colombiano.
Analistas advierten que esta decisión no afecta la condición de Petro como presidente ni su participación en organismos multilaterales como la ONU, pero sí representa un hecho sin precedentes en la relación entre ambos países. Recordaron que Washington ya había lanzado advertencias en el pasado sobre posibles sanciones, aunque nunca se había llegado a una medida tan directa contra un jefe de Estado colombiano en ejercicio.
La Cancillería de Colombia aún no se ha pronunciado oficialmente. Se espera que en las próximas horas el gobierno emita un comunicado para precisar su postura frente a la decisión de Washington, mientras la opinión pública sigue a la expectativa de las implicaciones diplomáticas y políticas que pueda traer este hecho.
Lo cierto es que la revocatoria de la visa, confirmada públicamente por el Departamento de Estado a través de sus canales oficiales en redes sociales, abre un nuevo capítulo de incertidumbre en la relación entre Colombia y Estados Unidos, dos naciones históricamente aliadas que ahora enfrentan uno de los momentos de mayor tensión diplomática en décadas.




