El denunciante, Gustavo Adolfo Rengifo, destaco que aún persistente escasez y lucha en la Comuna 7.
En una muestra de descontento, la comunidad de la comuna 7 en Ibagué, que ha iniciado una serie de protestas debido a la deficiente prestación del servicio de agua potable. Los residentes han expresado su indignación por la falta de suministro las 24 horas del día, exigiendo que se cumpla con lo establecido por la ley y la Constitución, ya que es algo básico y vital para el bienestar de todo el sector, para poder satisfacer sus necesidades básicas.
Suceso
La problemática se agrava al recibir agua en horas inusuales, alrededor de las 3 de la mañana, con un caudal mínimo y una presión tan baja que no alcanza a satisfacer las necesidades básicas de los hogares, especialmente en viviendas de dos o tres pisos. Los vecinos señalan que la situación es aún más crítica en sectores como el barrio Portales del Norte y el barrio El Salado, por esto han decidido protestar de manera pacífica.
Impacto
El Instituto de Acueducto y Alcantarillado del Tolima (IBAL) se ha estado llevando a cabo una campaña en la que, según la comunidad, prometen soluciones que no se han materializado. Además, alegan que la atención telefónica de la empresa es deficiente, sin respuestas satisfactorias a las preocupaciones planteadas.
Solución
El señor Gustavo Adolfo Rengifo representante del sector ha manifestado que van funcionarios del IBAL, toman fotos y se van, no solucionan nada, solo son paños de agua tibia para la comunidad. También les han exigido el cambio de medidores en menos de 40 días, la ciudadanía afirma que para cobrar si son buenos, pero para solucionar son deficiente, el sector se encuentra cansado de llamar a los números porque no reciben una respuesta. El bolsillo no les da más para comprar agua de botellón, para los quehaceres, están desesperados por la solución.
Medidas
La situación ha llevado a los ciudadanos a tomar medidas extremas, bloqueando las vías como una forma de protesta y exigiendo la presencia inmediata de funcionarios del Ibal y la alcaldía. Los residentes sostienen que llevan un mes enfrentando esta problemática, con escasa respuesta de las autoridades locales. De manera extraoficial, se ha informado que la gerente del Ibal, Erika Palma, se reunió con líderes comunitarios, pero la falta de soluciones concretas ha llevado a la solicitud de su presencia directa en la comuna 7. Los vecinos exigen respuestas y acciones inmediatas para poner fin a esta crisis que afecta la vida diaria de la población.
Los residentes señalan la ineficacia de los números de atención telefónica y la falta de resultados.

