La ola de violencia que sacude al norte del Valle del Cauca continúa dejando un rastro de dolor e incertidumbre entre sus habitantes. En esta ocasión, el municipio de El Águila fue escenario de un nuevo y lamentable hecho de sangre que cobró la vida de un joven identificado como Daniel Mauricio Torres Villegas, cuyo cuerpo fue hallado sin vida en zona rural de esta localidad.
Caso
El hecho se registró en el sector conocido como El Polvero, una zona situada entre los municipios de El Águila y Villanueva. De acuerdo con los reportes preliminares entregados por las autoridades, el cadáver fue encontrado por habitantes del sector, quienes dieron aviso de inmediato a la Policía Nacional. Al llegar al lugar, los uniformados acordonaron la zona mientras se realizaban las labores de inspección técnica del cadáver. Unidades de criminalística adscritas a la Fiscalía General de la Nación llegaron hasta el sitio y confirmaron que el cuerpo presentaba señales claras de tortura. Daniel Mauricio estaba atado de manos, pies y cuello, lo que sugiere que pudo haber sido sometido a intensos momentos de sufrimiento antes de morir. Aunque no se ha determinado con exactitud el tiempo que llevaba sin vida. El cuerpo fue trasladado a las instalaciones de Medicina Legal, donde un equipo forense se encargará de establecer con mayor precisión las causas del deceso, así como determinar si hubo empleo de arma blanca, de fuego u otro tipo de violencia física. Hasta el momento no se han revelado detalles sobre posibles capturas ni se ha emitido un pronunciamiento oficial por parte de la administración municipal.
Impacto
Sobre la vida de Torres Villegas se sabe que había nacido en el municipio de Caicedonia, ubicado también en el Valle del Cauca, pero estaba cedulado en la ciudad de Manizales, Caldas. Su círculo familiar y amistades aún tratan de entender las razones detrás de este violento suceso, ya que, según fuentes cercanas, el joven no había reportado amenazas ni situaciones de riesgo en los días previos. Este nuevo caso de homicidio vuelve a poner en evidencia la compleja situación de orden público en el norte del Valle, una región que en los últimos meses ha enfrentado un preocupante aumento de crímenes, desapariciones y hechos violentos que afectan principalmente a jóvenes. Organizaciones sociales han reiterado el llamado urgente al Gobierno Nacional para que implemente acciones concretas que permitan frenar esta espiral de violencia.
