La Corte Suprema de Justicia de Colombia ordenó la captura de Iván Name y Andrés Calle, expresidentes del Senado y de la Cámara de Representantes, respectivamente, por su presunta participación en un escándalo de corrupción relacionado con la aprobación de leyes impulsadas por el gobierno del presidente Gustavo Petro. Según las investigaciones, ambos habrían recibido beneficios indebidos a cambio de facilitar la tramitación de proyectos legislativos clave. La decisión judicial marca un nuevo capítulo en las tensiones entre los poderes del Estado y se suma a otros procesos en curso por irregularidades en el Congreso.
Tanto Name como Calle han rechazado públicamente las acusaciones y aseguran que demostrarán su inocencia ante los tribunales. La Fiscalía, por su parte, anunció que avanza en la recopilación de pruebas y en la búsqueda de más implicados en la red de favores y sobornos. Este caso podría tener implicaciones políticas importantes y generar repercusiones en la gobernabilidad, al estar vinculados dos de los máximos representantes del poder legislativo colombiano.
