GRASAS MONOINSATURADAS (MUFAS)
Las grasas monoinsaturadas son un tipo de ácido graso que tienen un enlace de carbono insaturado en la molécula. Son típicamente grasas líquidas, en forma de aceites, como el aceite de oliva extra virgen.
1 o 2 cucharadas de aceite de oliva al día puede ayudarnos a:
Reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Prevenir la aparición de diabetes.
Disminuir el riesgo de padecer aterosclerosis.
Reduce el riesgo de sufrir cáncer de colon.
Nos ayuda a controlar los niveles de colesterol, es decir, reducir el colesterol LDL.
GRASAS POLIINSATURADAS (PUFAS)
Estas grasas se descomponen en clasificaciones de Omega-3 y Omega-6. Es especialmente importante prestar atención a los Omega-3, ya que el cuerpo no los produce por sí mismo naturalmente, y porque son fuertes protectores contra las enfermedades del corazón.
Reducir los triglicéridos.
Reducen el riesgo de padecer arritmias.
Permiten disminuir la presión arterial y a favorecer el flujo sanguíneo.
