Nathaly Cortez Montaño fue encontrada en una habitación con lesiones graves en su cuerpo.
La víctima era madre de cuatro hijos, de los cuales vivía con los tres menores de 3, 7 y 16 años. Los dos más pequeños eran hijos de su actual pareja sentimental identificado como Luis Eduardo Calambas Artunduaga quien también residía en ese apartamento junto a los tres menores.
Según fuentes oficiales, la mujer departía con su pareja en un establecimiento comercial en la noche del pasado jueves. Luego, ingresó con el hombre a su apartamento y en la mañana del viernes, 22 de septiembre, fue encontrada en su habitación por su hijo, presentando lesiones graves en su cuerpo.
Frente al caso, el teniente coronel Misael Quiroga Morales, comandante Operativo y de Seguridad Ciudadana de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, a medios locales, la pareja salió de dicho establecimiento hacia la 1:30 de la madrugada del viernes.
De las lesiones se sabe que la mujer fue agredida con arma blanca, causándole una lesión grave en el pecho. Luego, el hombre habría huido de la escena, mismo lugar donde horas después la encontró uno de sus hijos.
De acuerdo, con las declaraciones de las autoridades del lugar de los hechos, el presunto responsable se acercó a una estación de policía.
“El hombre se entregó en la Estación de Piedecuesta, tras la presión ejercida por los grupos de investigación y aseguró que está dispuesto a confesar lo sucedido, pues se sintió presionado por nuestros uniformados y decidió entregarse, no fue capturado porque no hay flagrancia, lo dejamos a disposición de la Fiscalía para que se encargue de emitir la orden judicial y ser presentado ante un juez de garantías”, dijeron desde la estación de Piedecuesta.
Según allegados de la víctima y el presunto asesino indicaron que en múltiples ocasiones ella había sido agredida por su compañero sentimental y que al agresor ya tenía antecedentes, sin embargo, continuaban su relación.
Finalmente, el hecho generó angustia en el municipio, puesto que la mujer y su presunto feminicida eran muy conocidos en Guachetá, Cundinamarca, ya que vivieron en este municipio de la provincia de Ubaté durante un largo tiempo.
“Ellos eran muy conocidos acá, aparentemente parecían una pareja normal, obviamente tenían sus disgustos como cualquier relación, pero jamás pensamos que este hombre fuera a cometer un acto tan atroz, enviamos un saludo de condolencia a sus familiares, en especial a sus hijitos que tienen que sobrellevar esta situación con una mamá en la tumba y un papá en la cárcel”, concluyó, Nidia Prada, ciudadana conmocionada.
