Con el firme objetivo de que no quedé en el olvido un hecho histórico como es la Batalla de Barbacoas del primero de junio de 1824, el alcalde municipal Mario Alexander Hurtado invitó a la realización del primer conversatorio denominado ‘El Bicentenario se cuenta’.
La Alcaldía de Barbacoas bajo el liderazgo del alcalde Mario Hurtado Quiñones, Instituto Municipal de Cultura, Enlace de Educación y Oficina de Juventud, llevaron a cabo la primera jornada de conversatorio con estudiantes, docentes y comunidad en general. Con el fin de conmemorar el Bicentenario de la Batalla de Barbacoas. Lo cual permitió reflexionar sobre la historia, valorar el legado de aquellos que lucharon por la libertad y la soberanía del país.
La Batalla de Barbacoas, librada en 1824 en Nariño, Colombia, es recordada como un enfrentamiento significativo en la lucha por la independencia del país. En este contexto, se destacó la figura del capitán Ortiz y Zamora, quien lideró las fuerzas republicanas contra las tropas realistas comandadas por el coronel Agualongo Cisneros.
El capitán Ortiz y Zamora, un líder militar comprometido con la causa independentista, se enfrentó a un desafío formidable al combatir a las tropas del coronel Agualongo Agualongo, conocido por su lealtad a la Corona española y su habilidad estratégica, había establecido una sólida posición defensiva en Barbacoas.
El capitán Ortiz y Zamora, consciente de la importancia estratégica de Barbacoas, utilizó tácticas de guerrilla y aprovechó el apoyo de la población local, que en su mayoría simpatizaba con la causa republicana. Por otro lado, el coronel Agualongo Cisneros, con su experiencia y determinación, resistió los ataques republicanos. Sin embargo, las fuerzas realistas enfrentaron dificultades para mantener sus posiciones.
La victoria del capitán Ortiz y Zamora en Barbacoas tuvo repercusiones. Este triunfo permitió a las fuerzas republicanas asegurar el control del suroeste de Colombia. La derrota de Agualongo, a pesar de su formidable defensa, marcó un punto de inflexión en la lucha por la independencia, debilitando significativamente la posición de los realistas en la región.
Además, la batalla resaltó la importancia del liderazgo y la colaboración entre las fuerzas republicanas y la población civil. La capacidad de Ortiz y Zamora para inspirar y movilizar tanto a sus tropas como a los habitantes fue esencial. Esta colaboración no solo facilitó la victoria en Barbacoas, sino que también sentó un precedente para futuras operaciones militares y la construcción de una nación unida en torno a la causa independentista. En conclusión, la batalla fue un enfrentamiento decisivo en la lucha por la independencia.




