El Congreso de la República dio un paso clave esta semana al aprobar en primer debate el Proyecto de Ley 043 de 2025, una iniciativa que marca un precedente en la defensa de los recursos hídricos y la sostenibilidad pesquera del país. La propuesta, concentrada en la protección, conservación, recuperación y repoblación del bocachico, se perfila como una herramienta estratégica para enfrentar el deterioro de los ecosistemas fluviales y garantizar la supervivencia de una especie que ha sido fundamental para la economía y la cultura de las comunidades ribereñas.
El bocachico, presente históricamente en cuencas como la del río Magdalena, ha representado por décadas una fuente de sustento económico y un componente esencial de la proteína animal consumida por miles de familias. Sin embargo, la presión pesquera, la contaminación y la transformación de los hábitats naturales han llevado a una disminución preocupante de sus poblaciones. Ante este panorama, el proyecto de ley busca sentar bases sólidas para su recuperación, promoviendo un enfoque integral y de largo plazo.
La iniciativa plantea la creación y puesta en marcha de un Plan Nacional de Conservación del Bocachico, instrumento que articulará acciones gubernamentales, científicas y comunitarias alrededor de la restauración de ecosistemas degradados, el establecimiento de programas de repoblamiento y la implementación de sistemas de monitoreo ambiental que permitan evaluar la evolución de la especie y la efectividad de las medidas adoptadas.
Propuestas
De acuerdo con los ponentes, este proyecto surge no solo como una respuesta a las alertas ambientales, sino como un compromiso con la seguridad alimentaria y nutricional del país. El fortalecimiento de la pesca sostenible y la preservación de las especies nativas se consolidan como pilares para garantizar que las futuras generaciones tengan acceso a recursos biológicos sanos y disponibles.
Asimismo, el articulado resalta la necesidad de involucrar a las comunidades ribereñas en las estrategias de conservación, reconociendo su conocimiento ancestral y su relación directa con los ríos. Según los legisladores, cualquier política pública destinada a proteger especies como el bocachico debe construirse con enfoque participativo y sensibilidad territorial.
El avance del Proyecto de Ley 043 de 2025 abre la puerta a un debate más amplio en las próximas sesiones del Congreso, donde se espera consolidar un marco jurídico robusto que permita frenar el deterioro de la biodiversidad acuática. Para sus impulsores, esta es una oportunidad histórica para demostrar que la protección ambiental puede ir de la mano con el desarrollo económico y la justicia social.
Mientras el país sigue enfrentando los retos del cambio climático y la degradación de sus principales ríos, iniciativas como esta ponen sobre la mesa la urgencia de actuar con decisión y visión de futuro. El destino del bocachico y de los ecosistemas que lo sostienen dependerá de la capacidad del Estado y la sociedad de avanzar en la misma dirección.




