Habitantes del corregimiento de Jamondino en la capital nariñense, manifestaron las actuales circunstancias por las que atraviesan, debido a la actual contingencia que dejó a las comunidades rurales sin abastecimiento de agua.
Daños
La problemática se suscita tras el desbordamiento de la quebrada Guachucal, la cual, a su paso, destruyó los acueductos veredales ocasionando que los habitantes de estos sectores padezcan desabastecimiento.
La presidenta de la Junta de Acción Comunal del corregimiento, Leidy López, sobre la situación que actualmente enfrentan dio a conocer que “nuestro acueducto veredal quedó completamente destruido, la bocatoma y desde esos instantes hemos estado con la problemática de agua potable”.
Continuó “como Jamondino está desconectado de la vía principal, solo hay transito hasta el Rosario y por la perimetral la entrada es confusa, las ayudas se están quedando en El rosario porque aquí en Jamondino todavía no se ha recibido las ayudas para la gente”, expresó López.
Incertidumbre
A través de la vocería de la presidenta, los habitantes de estas comunidades que aún enfrentan las condiciones de desabastecimiento del líquido vital, hacen un urgente llamado para que se brinde pronta atención a estas poblaciones que presentan dificultades en la obtención de agua.
De acuerdo con lo expuesto por Leidy López, esta situación está afectando a los sectores de Jamondino Alto, Santa Elena y El Paraíso, quienes hasta el momento aún no han recibido estas ayudas y continúan con la incertidumbre intacta frente a esta circunstancia.
“Se había convocado una minga comunitaria para poder avanzar un poco en los trabajos que se están realizando en los alrededores de la quebrada, y resulta que empezó un nuevo desprendimiento de la montaña, afortunadamente se tuvo una respuesta inmediata de los organismos de seguridad y de rescate, quienes han estado muy pendientes”, puntualizó López.
