Tras meses de incertidumbre, cerca de 60 colonos llegaron a un acuerdo con el ingenio para el pago progresivo de cosechas pendientes desde diciembre de 2024. La Personería Municipal actuó como garante del proceso.
El ingenio, la cabaña, es una empresa Agroindustrial, ubicada en el departamento del Cauca, dedicada a la producción y comercialización de azúcares y mieles. Esta compañía consolidada tuvo un proceso de crisis financiera compleja desde 2024 cuando se adaptó a un proceso de reorganización empresarial.
Por más de casi ocho décadas, es una empresa que se ha convertido en una de las empresas insignia de Colombia, siendo pioneros en diversos proyectos de la agroindustria de la caña como la cogeneración de energía, la creación de la primera Zona Franca Agroindustrial Empresarial del país y la apuesta por la educación de la región.
Después de varios meses sin recibir pago por su trabajo, cerca de 60 colonos cañeros que laboran para el Ingenio La Cabaña lograron concretar un acuerdo de pago con la empresa, tras una reunión sostenida el 10 de julio en el municipio de Guachené.
El encuentro, acompañado por el personero municipal Jair Montaño, concluyó con la firma de un acta que establece un cronograma para saldar las deudas por cosechas desde diciembre de 2024 hasta junio de 2025. El acuerdo contempla pagos escalonados, iniciando el mismo día del encuentro, y finalizando el 31 de julio con la cancelación total.
Actualmente, los accionistas que tienen mayor representación en el Ingenio La Cabaña son Agro el Arado SAS (33,13%), Danador SAS (31,85%), Sociedad de Inversiones Montana SAS (31,85%) y otros accionistas (3,18%)
Además del calendario de pagos, el documento incluye compromisos clave por parte del ingenio: normalizar los pagos mensuales, reconocer intereses por retrasos, y fortalecer la vigilancia en el transporte de la caña desde el corte hasta la entrega.
La firma del acta fue realizada por representantes de los colonos y del ingenio, con la presencia de Olider Gómez Aponza, Orfi Lucumí Valencia, Carlos Andrés Viafara González, entre otros representantes de los colonos, y por parte del ingenio firmaron Luis Enrique Saavedra (gerente general), Abraham Victoria Olivares (director de campo), Carlos Augusto Gómez (gestión de talento) y Bernardo Urrego (proveeduría de caña). Este pacto representa un respiro para las familias campesinas que durante más de seis meses han laborado sin recibir retribución, generando gran tensión en la zona rural del norte del Cauca.



