El presidente de Colombia, Gustavo Petro, sostuvo un encuentro este viernes 10 de octubre en Bruselas con las dos ciudadanas colombianas que fueron detenidas y posteriormente deportadas por Israel mientras participaban en una flotilla humanitaria con destino a la Franja de Gaza.
Las connacionales, identificadas como Manuela y Luna, habían formado parte de una iniciativa internacional que buscaba llevar alimentos y ayuda humanitaria a la población gazatí, que enfrenta una grave crisis humanitaria producto del prolongado conflicto en la región. Durante la misión, fueron arrestadas por las autoridades israelíes, lo que generó críticas y denuncias sobre la legalidad de las detenciones.
El propio presidente Petro destacó la labor de las dos colombianas a través de una publicación en la que las describió como mujeres que representan la solidaridad auténtica y desinteresada, resaltando su compromiso con los pueblos más afectados por la guerra y la codicia. Según sus palabras, se trata de “mujeres de paz, mujeres de verdad, mujeres de la humanidad y de la vida”.
El gesto de recibir personalmente a las activistas en Bruselas fue interpretado como un respaldo directo del gobierno colombiano a las iniciativas humanitarias internacionales, y como una reafirmación de la postura crítica de Petro frente a las acciones del gobierno israelí en Gaza.
La reunión se enmarca en la creciente tensión diplomática entre Colombia e Israel, al tiempo que pone de relieve el compromiso de Bogotá con la defensa de los derechos humanos y el apoyo a las misiones humanitarias que buscan aliviar el sufrimiento de las comunidades afectadas en Oriente Medio.




