Un estudio reciente titulado Panorama de las librerías en Colombia, elaborado por la Cámara Colombiana del Libro (CCL), muestra que el país ha experimentado un crecimiento notable en el número de librerías durante lo que va del siglo XXI. Sin embargo, también advierte que aún queda mucho por hacer para que estos espacios culturales lleguen a todos los rincones del territorio nacional.
El análisis se basó en una muestra de 205 librerías, con 444 puntos de venta, distribuidos en 54 municipios del país. Según el presidente ejecutivo de la CCL, Emiro Aristizábal, estos datos no solo brindan un panorama actualizado de la situación, sino que pueden servir como herramienta útil para que las autoridades locales y nacionales diseñen políticas públicas que impulsen el desarrollo del sector.
Entre los hallazgos más importantes se destaca que, aunque en las principales ciudades el crecimiento ha sido evidente, existe una brecha significativa en zonas menos pobladas. En particular, comunidades rurales o municipios pequeños aún carecen de acceso regular a librerías, lo que limita la difusión de la cultura, la lectura y el conocimiento.
El estudio plantea que para seguir con esta tendencia positiva es fundamental fortalecer incentivos para la apertura de librerías en regiones apartadas, mejorar la cadena logística de distribución de libros, fomentar alianzas entre librerías y gobiernos locales, e impulsar programas educativos y culturales que acerquen la lectura a todos los sectores sociales.
Con estos datos sobre la mesa, la Cámara Colombiana del Libro hace un llamado al Estado y a los actores del sector para que no solo celebren los avances, sino que también actúen para superar los retos pendientes en la democratización del acceso a los libros.

