En su primer partido del Mundial Femenino Sub-17, disputado en Santo Domingo (República Dominicana), Colombia empató 1-1 ante Corea del Sur. El encuentro estuvo marcado por un inicio complicado para la selección tricolor, ya que las asiáticas dominaron los primeros minutos del partido. Sin embargo, el equipo colombiano logró reorganizarse y equilibrar el juego, generando oportunidades en el ataque.
La recompensa llegó al minuto 27, cuando Ella Grace Martínez anotó el primer gol para Colombia, aprovechando un descuido en la defensa surcoreana. Con este tanto, la tricolor tomaba la delantera, pero la alegría duró poco. Un penalti cometido por Zarhay González permitió que Corea empatara poco antes del final del primer tiempo, lo que puso presión sobre las jugadoras colombianas.
Durante el segundo tiempo, las condiciones climáticas se convirtieron en un factor determinante. El intenso calor y la alta humedad de Santo Domingo afectaron el ritmo del juego, obligando a Colombia a ceder terreno y replegarse para resistir el ataque surcoreano. Las coreanas, por su parte, incrementaron la presión, especialmente en los últimos minutos del partido, buscando desequilibrar el marcador.
A pesar de los intentos y la insistencia de Corea, el marcador no cambió. Colombia, que apostó por los contragolpes como estrategia para aprovechar cualquier oportunidad en ataque, logró mantener el empate. Sin embargo, este resultado deja a la selección con la responsabilidad de buscar puntos en sus próximos compromisos ante rivales de alto nivel como Estados Unidos y España.
El empate en el debut pone a la tricolor en una posición que exige mejorar y adaptarse rápidamente para seguir en la lucha por avanzar en el torneo. El equipo colombiano, que ha mostrado determinación y capacidad de reacción, buscará en los próximos partidos consolidar su juego y asegurar su paso a la siguiente fase del Mundial Femenino Sub-17.




