Los productores agrícolas de Colombia están enfrentando grandes retos debido al cambio climático, que está afectando las cosechas en varias regiones del país. Según expertos, las alteraciones en los patrones climáticos, como el aumento de la frecuencia de sequías y lluvias torrenciales, están afectando especialmente a cultivos clave como el café, el maíz y las frutas tropicales. En algunas zonas del país, los agricultores han reportado pérdidas de hasta un 40% en sus cosechas debido a los fenómenos climáticos extremos.
El gobierno colombiano ha anunciado que implementará medidas para mitigar los efectos del cambio climático en la agricultura, como la implementación de sistemas de riego más eficientes y la promoción de técnicas de cultivo resistentes al clima. Sin embargo, muchos productores pequeños temen no poder adaptarse a los cambios y están pidiendo un apoyo más sólido por parte del gobierno para asegurar la sostenibilidad de sus actividades. Además, la crisis climática también está afectando la seguridad alimentaria en varias regiones rurales, donde la falta de recursos y tecnología complica aún más la adaptación.