El anuncio de un posible cobro de entrada al Monumento de Cristo
Rey, previsto para abrir antes de la COP16, ha generado opiniones
divididas en algunos sectores de Cali. La propuesta, presentada por
el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente
(Dagma), busca que el parque sea autosostenible financieramente.
Mauricio Mira Pontón, director del Dagma, explicó que la idea de
implementar un cobro mínimo para el ingreso al parque responde a
la necesidad de cubrir los costos fijos de mantenimiento y
operación. Según Mira Pontón, el cobro se ajustaría según la
capacidad de pago de los visitantes. Para los estratos 1, 2 y 3, se
prevé una exoneración parcial del costo, mientras que los
extranjeros podrían enfrentar tarifas diferenciadas, similar a lo que
ocurre en parques internacionales.
Enfoque
Mira Pontón argumenta que este enfoque es una cuestión de
economía de escala y equilibrio financiero. «El cobro es necesario
para asegurar la manutención del parque y generar un retorno
económico que permita su reinversión y capitalización. Los costos
fijos deben ser cubiertos, y no sería justo que el Estado o el
Municipio asuman estos gastos en lugar de reubicarlos para otros
temas sociales importantes,» dijo.
La propuesta ha generado debate, con algunos sectores de la
ciudad preocupados por la posible barrera económica para el
acceso de los residentes locales. Otros, sin embargo, apoyan la
iniciativa como un medio necesario para garantizar la sostenibilidad
del parque a largo plazo.




