Un nuevo escándalo sacude a la Fuerza Pública en la zona de frontera. Cinco miembros activos de la Policía Nacional y tres civiles fueron cobijados con medida de aseguramiento por su presunta vinculación con actividades de contrabando en pasos ilegales entre Colombia y Venezuela.
Según la investigación adelantada por la Fiscalía General de la Nación, los procesados habrían participado en una red dedicada al ingreso ilícito de mercancías al país, facilitando el tránsito de productos sin los debidos controles aduaneros a cambio de dádivas económicas.
Las autoridades judiciales indicaron que los hechos se habrían desarrollado en puntos estratégicos de la frontera, donde los uniformados presuntamente permitían el paso de los cargamentos ilegales, omitiendo sus funciones de control a cambio de beneficios personales.
Durante las audiencias preliminares, un juez de control de garantías dictó medida de aseguramiento privativa de la libertad contra los ocho implicados, quienes enfrentarán cargos por delitos relacionados con concierto para delinquir, cohecho y favorecimiento al contrabando.
“La investigación sigue en curso y no se descartan nuevas capturas”, señaló la Fiscalía en un comunicado, subrayando que este tipo de actuaciones no representan a la institución, pero serán sancionadas con contundencia.
La Policía Nacional, por su parte, anunció la apertura de una investigación disciplinaria interna y reiteró su compromiso con la transparencia y la lucha contra la corrupción.
