El capitán Pérez también destacó que dos de los establecimientos intervenidos ya habían sido sancionados en el pasado por infracciones similares.
A pesar de haber sido cerrados anteriormente, estos locales volverán a ser sometidos a sanciones adicionales, con un período de sellamiento de 3 y 5 días, respectivamente. Estas acciones reflejan un esfuerzo continuo por parte de las autoridades para controlar la venta irresponsable de alcohol y garantizar la seguridad pública.
En un llamado a la comunidad, el capitán instó a los residentes de Flandes a colaborar en la protección de los menores de edad. Específicamente, Pérez solicitó que no se permita el ingreso de jóvenes a lugares donde se vendan bebidas alcohólicas, recordando la importancia de cumplir con las normas establecidas en el artículo 1801 del Código de Policía. Este artículo es crucial para la prevención de problemas relacionados con el consumo de alcohol entre los menores.
En relación con las grabaciones realizadas durante el operativo, el capitán Pérez aclaró que, según la ley vigente, específicamente el artículo 21 del Código de Policía, es legal grabar los procedimientos policiales. Esta normativa establece que «todos los procedimientos policiales podrán ser grabados a través de cualquier medio de las tecnologías de la información y las comunicaciones». Por lo tanto, no es ilegal registrar estos eventos a menos que haya una restricción legal explícita.
