Un reciente informe de la empresa de seguridad Kaspersky reveló que casi 20 millones de ciberataques en 2024 se ocultaron tras la fachada de videojuegos populares. Esta alarmante cifra demuestra cómo los criminales informáticos están utilizando títulos famosos para distribuir malware y robar información de los usuarios.
Juegos famosos, el gancho perfecto
Los atacantes suelen usar nombres de videojuegos reconocidos como Minecraft, Roblox y Fortnite para enmascarar archivos maliciosos. A través de enlaces falsos o versiones supuestamente gratuitas, engañan a los usuarios para que descarguen programas que comprometen sus dispositivos.
Según Kaspersky, Minecraft fue el título más utilizado en estas campañas. Solo este juego estuvo vinculado al 70 % de los intentos de infección, especialmente en equipos con sistema operativo Windows.
Cómo operan estos ciberataques
Los delincuentes crean páginas falsas que simulan ser tiendas de aplicaciones, foros o sitios de descarga oficiales. Allí ofrecen juegos «modificados» o «premium» de forma gratuita. Una vez que el usuario instala el software, el malware se activa en segundo plano, robando contraseñas, información bancaria o incluso tomando el control total del equipo.
El informe también señala que muchos de estos archivos maliciosos se comparten en redes sociales, servicios de mensajería y plataformas de video, donde los títulos atractivos despiertan la curiosidad de los usuarios más jóvenes.
Usuarios jóvenes, los más afectados
Los principales afectados por estos ataques son niños y adolescentes, quienes no siempre cuentan con conocimientos básicos de ciberseguridad. Su entusiasmo por obtener juegos gratuitos o funciones especiales los convierte en blancos fáciles para los cibercriminales.
Los expertos recomiendan a los padres instalar controles parentales y soluciones antivirus confiables, además de educar a sus hijos sobre los peligros de descargar contenido de fuentes no oficiales.
Recomendaciones para protegerse
Para evitar caer en este tipo de trampas, Kaspersky sugiere seguir estas buenas prácticas:
- Descargar juegos solo desde tiendas oficiales como Google Play, App Store o plataformas reconocidas como Steam o Epic Games.
- Evitar los enlaces compartidos en redes sociales o correos electrónicos sospechosos.
- Mantener actualizado el sistema operativo y el antivirus.
- Supervisar la actividad online de los menores de edad.
La creciente sofisticación de estos ataques evidencia que la ciberseguridad debe ser una prioridad, especialmente en entornos familiares y educativos. Estar informado es el primer paso para protegerse en un mundo digital cada vez más peligroso.




