La comunidad de Bruselas amaneció consternada tras conocerse la muerte de Emilio Plazas, un hombre reconocido por sus vecinos y familiares en la vereda Holanda, quien perdió la vida de manera abrupta en un accidente que pudo evitarse. El hecho ocurrió en horas de la noche del domingo, cuando la víctima se desplazaba en motocicleta y terminó chocando con un vehículo tipo turbo en la vía Pitalito-Bruselas, un corredor donde la inseguridad vial se ha convertido en un enemigo silencioso.
El fallecimiento de Plazas no es solo una cifra más en las estadísticas de tránsito; es el reflejo de una realidad donde cada viaje se convierte en una ruleta rusa.
Carreteras peligrosas
El accidente abre un nuevo frente de críticas hacia las autoridades municipales y departamentales, quienes han prometido durante años intervenir esta vía estratégica que conecta al casco urbano de Pitalito con el centro poblado de Bruselas. Pese a ser una ruta de alto flujo, la falta de señalización, la escasa iluminación y el deterioro del pavimento convierten el trayecto en un escenario propicio para la tragedia.
A esto se suma la falta de controles viales efectivos. Habitantes del sector aseguran que la imprudencia de conductores de carga pesada, combinada con motociclistas que transitan sin medidas de seguridad suficientes, ha hecho de este corredor un punto crítico en la accidentalidad del sur del Huila.
Investigación en curso
La Policía de Tránsito informó que se iniciaron las investigaciones para esclarecer las causas exactas del accidente que cobró la vida de Emilio Plazas. Sin embargo, la comunidad recibe este anuncio con escepticismo, pues cada accidente se investiga, pero las conclusiones rara vez derivan en soluciones estructurales.
El temor de muchos es que la muerte de Plazas se convierta en una noticia más que encienda alarmas momentáneas, pero sin provocar cambios reales en materia de seguridad vial y prevención de accidentes.
Tragedia
Los habitantes de Bruselas piden que este nuevo caso no quede en la indiferencia. Reclaman al gobierno local y departamental acciones inmediatas: intervención de la vía, mayor presencia de autoridades de tránsito y campañas serias de prevención.
El deceso de Emilio Plazas deja dolor en una familia y en una comunidad que hoy lo llora, pero también debería dejar una lección a quienes administran el territorio: no es suficiente lamentar las muertes, se necesitan decisiones que eviten que la vía Pitalito-Bruselas siga cobrando vidas.
Un nombre, una historia y una tragedia más que evidencia la deuda pendiente con la seguridad vial en el sur del Huila.
