El presidente Gustavo Petro protagonizó un enfrentamiento diplomático con el Parlamento Europeo luego de que este aprobara una resolución que critica la situación de violencia política y la intimidación en Colombia, tras el asesinato del senador Miguel Uribe Turbay. Europeos exigieron que se investigue adecuadamente el caso, incluyendo instigadores, pero Petro respondió acusando al Parlamento de estar desinformado e ignorante, y afirmó que algunas de las denuncias provienen de quienes “operan desde Europa”.
La controversia tiene lugar semanas antes de la cumbre UE‑CELAC que se celebrará en Santa Marta, lo que añade tensión al relacionamiento internacional de Colombia. Los críticos europeos advierten que la situación de impunidad y amenazas a opositores políticos debe atenderse de cara a los comicios presidenciales de 2026, mientras el gobierno insiste en que muchas de las observaciones no entienden el contexto interno colombiano




