El Chelsea ha logrado una importante recuperación financiera gracias a la venta de su equipo femenino a BlueCo, el consorcio que controla el club y que está bajo la dirección de Todd Boehly. Esta transacción, registrada como “beneficios por venta de filiales”, ha sido clave para que el club reportara beneficios de 128,4 millones de libras (153 millones de euros) en el ejercicio fiscal 2023-2024, una mejora significativa respecto a las pérdidas de 90 millones de libras en 2022-2023.
La decisión de vender la división femenina en mayo de 2024 permitió que pasara a ser gestionada como un negocio independiente del equipo masculino, facilitando el saneamiento de las cuentas del club. Gracias a esta operación, el Chelsea generó ingresos por 198,7 millones de libras, evitando así una posible violación del ‘fair play’ financiero de la Premier League, que solo permite pérdidas de hasta 105 millones de libras en un periodo de tres años.
No es la primera vez que el Chelsea utiliza la venta de activos para equilibrar sus finanzas. En la temporada 2022-2023, el club ya había vendido dos hoteles de su propiedad a BlueCo, lo que redujo sus pérdidas de 166,4 millones de libras a 90 millones.
A pesar de esta mejora económica, los ingresos del Chelsea cayeron de 512,5 millones de libras en 2022-2023 a 468,5 millones en 2023-2024, en gran parte debido a la ausencia de competiciones europeas la pasada temporada. Con esta nueva estrategia financiera, el club busca estabilidad y cumplir con las normativas económicas de la Premier League mientras intenta regresar a la élite del fútbol europeo.


