La decisión del Tribunal Superior de Antioquia de condenar a 28 años y seis meses de prisión a Santiago Uribe Vélez, hermano del expresidente Álvaro Uribe, desató un intenso cruce político y jurídico en redes sociales.
Tras confirmarse la sentencia por los delitos de concierto para delinquir y homicidio agravado, relacionados con el grupo paramilitar conocido como Los Doce Apóstoles el abogado Miguel Ángel del Río, quien ha sido una de las voces más visibles en procesos de derechos humanos y en críticas al uribismo, celebró la decisión del tribunal y aseguró que se trataba de un fallo “ejemplar”.
Las declaraciones de Del Río encendieron la molestia del Centro Democrático, que reaccionó con dureza. A través de varios pronunciamientos, el partido afirmó que el abogado “politiza las decisiones judiciales” y lanzó frases como:
“Si fuera más abogado, entendería que esto aún no es cosa juzgada”.
Los líderes del uribismo reiteraron su respaldo a Santiago Uribe y cuestionaron la imparcialidad del proceso, señalando que acudirán a las instancias jurídicas necesarias para controvertir el fallo.
Mientras tanto, Miguel Ángel del Río respondió que las críticas no lo intimidan y sostuvo que la sentencia es un paso importante para las víctimas en Antioquia.
El caso continúa generando fuertes tensiones políticas, especialmente por tratarse de uno de los procesos más sensibles relacionados con la historia del paramilitarismo en Colombia.
