En desarrollo de operaciones militares dentro del Plan Ayacucho Plus, tropas del Ejército Nacional capturaron a alias El Paisa, señalado como cabecilla logístico de las estructuras residuales Franco Benavides y Urías Rendón. La operación se llevó a cabo en zona rural del municipio de Magüí Payán, Nariño, tras más de tres meses de labores de inteligencia.
El procedimiento, liderado por el Batallón de Despliegue Rápido N.° 2, incluyó apoyo aéreo debido a la compleja geografía de la región. Las tropas llegaron al área y sostuvieron un combate directo con integrantes del grupo armado. Como resultado, lograron capturar al individuo en flagrancia con material bélico y de intendencia.
Alias El Paisa tenía vigente una orden de captura por fabricación, tráfico y porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares. En el lugar se incautó un fusil M-16, una pistola, una escopeta, 12 proveedores, más de 325 cartuchos y equipos de comunicación utilizados por la estructura criminal. Durante el enfrentamiento, perdió la vida una mujer no identificada, quien presuntamente era pareja del capturado.
Al conocerse la captura, aproximadamente 350 personas de la zona organizaron una asonada para evitar su traslado. Con motocicletas, vehículos y lanchas, bloquearon accesos y el posible aterrizaje de aeronaves en la zona.
La multitud también impidió la llegada de personal de la Policía Nacional, obstaculizando la realización de los actos urgentes de judicialización. La situación se tornó tensa y requirió medidas especiales por parte de las unidades militares. Los soldados activaron protocolos de seguridad y aplicaron maniobras disuasivas para evitar la fuga del detenido, así como para proteger el material incautado durante el operativo.
A pesar de las hostilidades, la operación culminó con éxito. Las tropas lograron evacuar tanto al capturado como a los elementos incautados, entregándolos posteriormente a las autoridades judiciales mediante coordinación con la Policía.
Este resultado representa un nuevo avance en la ofensiva contra los factores de violencia que operan en el suroccidente colombiano. El Ejército reitera su compromiso con la seguridad de la región y el debilitamiento de los grupos armados organizados. Las autoridades continúan monitoreando la zona, dado que los bloqueos ciudadanos podrían estar relacionados con presiones de los grupos ilegales sobre la población civil.



