En una meticulosa y coordinada acción entre la Policía Metropolitana de Bogotá, la Seccional de Investigación Criminal y la Seccional de Inteligencia Policial, en estrecha colaboración con la Fiscalía General de la Nación, se desmanteló una peligrosa banda delictiva dedicada al asalto y robo de residencias en distintas localidades de Bogotá. Estos criminales, valiéndose de artimañas y disfraces, ingresaban a los hogares bajo la fachada de empleados de empresas de servicio público, perpetrando robos violentos y sembrando el terror en las comunidades afectadas.
Durante un extenso período de investigación de doce meses, los agentes de la SIJIN siguieron de cerca los movimientos y actividades de esta red criminal, que sembraba el caos y la angustia en barrios de Puente Aranda, Fontibón, Kennedy y Bosa. Utilizando la modalidad de atraco, los delincuentes ingresaban a las viviendas bajo engaños, para luego someter a los residentes, intimidándolos con armas de fuego y armas blancas, con el objetivo de saquear sus pertenencias más valiosas, incluyendo joyas, dinero en efectivo y dispositivos electrónicos.
La operación policial culminó con la ejecución de nueve diligencias de registro y allanamiento en diversas localidades de la capital, incluyendo Suba, Usaquén, Bosa, Kennedy, Usme y Puente Aranda. Durante estas incursiones, se logró la captura de cuatro individuos señalados como miembros activos de la organización criminal, quienes fueron detenidos mediante órdenes judiciales. Estos individuos deberán responder ante la justicia por los delitos de concierto para delinquir, hurto calificado y agravado, tráfico de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego.
Además de las capturas, las autoridades lograron importantes decomisos durante la operación, entre ellos un vehículo utilizado por la banda para cometer los delitos, así como cuatro armas de fuego y una considerable cantidad de munición de diferentes calibres. También se confiscaron diversas sustancias estupefacientes, incluyendo marihuana y bazuco, destinadas a la venta ilegal en diferentes sectores de la ciudad.
Alias ‘El Gordo’, identificado como el cabecilla de la banda, era el encargado de obtener información sobre las posibles víctimas a través de contactos en el mundo del comercio local, aprovechando su condición de expendedor de drogas para recabar datos sobre los residentes de las viviendas que serían blanco de los robos.
La captura de esta peligrosa banda representa un golpe contundente al crimen organizado en la ciudad, y contribuye significativamente a la disminución del delito de hurto a residencias, que ha experimentado una reducción del 28 por ciento. La Policía Metropolitana de Bogotá reafirma su compromiso con la seguridad ciudadana y hace un llamado a la comunidad a denunciar cualquier actividad delictiva a través de los canales dispuestos para tal fin, como la línea de emergencia 123.




