En el barrio Cantarrana 1, se vivieron momentos de tensión cuando un joven fue sorprendido en flagrancia mientras robaba un teléfono celular a un estudiante de la Institución Educativa INEM Luis López de Mesa. Según testigos, el hecho ocurrió a plena luz del día cuando el joven, de unos 20 años, interceptó al estudiante, despojándolo de su dispositivo móvil con el propósito de huir rápidamente del lugar.
En alerta
La comunidad del sector, alertada por los gritos de la víctima, no tardó en reaccionar. Varios residentes se organizaron para perseguir al presunto ladrón, logrando detenerlo a pocas cuadras del lugar del hurto. Minutos después, agentes de la Policía Metropolitana de Villavicencio llegaron al sitio y procedieron con la captura del joven, quien en ese momento portaba un brazalete de seguimiento del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), lo que indica que ya estaba bajo un régimen de vigilancia judicial.
Desprotegidos
Este hecho ha generado una gran preocupación entre los habitantes del barrio Cantarrana y sus alrededores, quienes manifiestan sentirse inseguros ante el aumento de los casos de hurto en la ciudad. “Ya no es solo que nos roben en horas de la noche, ahora los delincuentes están atacando en plena mañana, sin importarles quiénes los puedan ver o denunciar. Es angustiante”, señaló uno de los residentes de la zona.
Indignación
Las autoridades han confirmado que el joven aprehendido cuenta con antecedentes penales por delitos relacionados con el hurto y que, al momento de su captura, aún se encontraba bajo el régimen de casa por cárcel, razón por la cual portaba el dispositivo de vigilancia electrónica en su tobillo. Esto ha generado indignación entre la comunidad, que se pregunta cómo es posible que una persona con tales antecedentes continúe cometiendo delitos en las calles de la ciudad, a pesar de las medidas restrictivas impuestas.




