Henry Cortés, veedor, hace un emergente llamado a la ciudadanía a cuidar el medio ambiente.
Giraldo

El río Combeima, es una de las fuentes naturales más importantes de la ciudad de Ibagué, dicho río cumple un papel importante ya que es el encargado de abastecer de agua, la tierra de los ocobos, según Henry Cortés, integrante de la Unión de Veedurías por el Agua de Ibagué (UVA) en el sector se logra ver como en el barrio Alto de la Cruz una cascada de aproximadamente ocho metros destila en ella aguas negras o residuales de alrededor 400.000 ibaguereños.
Situación
La preocupación aumenta cada vez más ya que al pasar por aquel lugar se logra evidenciar los malos olores, una problemática que alarma a todos los ciudadanos, pero antes de hablar más sobre aquella situación a continuación se dará un pequeño repaso sobre donde queda exactamente ubicada la cascada, tal belleza natural se encuentra en la comuna 11 de la ciudad de Ibagué, la cual se encuentra lejos de la principal bocatoma de la Empresa Ibaguereño de Acueducto y Alcantarillado (IBAL).
Declaración
Cerca de 50 toneladas anuales de excremento y 11 millones de litros de orina, caen en la cascada así lo mencionó Henry Cortés, de UVA, según Cortés, los habitantes de la Arboleda Campestre, han expresado su preocupación por la calidad del agua que reciben, la cual consideran insegura para el consumo humano, asimismo Cortés expresó que la calidad del agua ha afectado a varias personas afectándoles la piel y ocasionándoles problemas gastrointestinales, a pesar de los problemas reportados, las autoridades aún no han investigado la situación.
Por otro lado, el concejal Zambrano señaló que solo el 20% de las aguas residuales en Ibagué son tratadas, esto da a entender que una gran cantidad de agua llega al río Combeima sin ser procesadas, al mismo tiempo, Andrea Sánchez, aseguró que el agua que consumen proviene de fuentes contaminadas.




