Tania Jazmín Ojeda Ávila, buscada por robo agravado y asociación ilícita, fue detenida en el Aeropuerto Internacional El Dorado por autoridades colombianas en coordinación con Interpol y la Dijin.
La mujer fue descubierta luego de intentar ingresar a Colombia con un pasaporte trucado. Jazmin Ojeda, es reconocida por ser la esposa del futbolista del Deportivo Cali Fabián Andrés Castillo Sánchez, al parecer unas fotos compartidas por el jugador permitieron agilizar su captura.
Miembro de ‘Los Mazos’ y su participación en el robo de joyerías
Ojeda está vinculada a la banda criminal conocida como ‘Los Mazos’, una organización dedicada al robo de joyas de alto valor en América y Europa. Según la investigación, su participación en la banda incluía la logística y planificación de los robos, además de fungir como conductora en uno de los hurtos.
“En un trabajo articulado con las autoridades de Costa Rica, logró capturar mediante notificación roja con fines de extradición en el Aeropuerto Internacional el Dorado de la ciudad de Bogotá, a la ciudadana mexicana Tania Jazmín Ojeda Ávila, en el momento en que intentaba ingresar a territorio nacional, quien es requerida por el Juzgado Penal del Tercer Circuito Judicial de Pavas en Costa Rica, por los delitos de robo agravado y asociación ilícita”, indicó Interpol Colombia.
En particular, las autoridades de Costa Rica la señalan por su implicación en el robo simultáneo de dos joyerías en el distrito de Escazú, San José, el 31 de octubre de 2017, en el que el botín superó el millón de dólares.
Modus operandi de la banda
‘Los Mazos’ operaban seleccionando previamente los países y las joyerías donde cometerían los robos. En el caso de Costa Rica, varios miembros, entre ellos Tania Ojeda, viajaron en grupos pequeños para evitar levantar sospechas, hospedándose en distintos hoteles. El día del robo, divididos en dos equipos, asaltaron la Relojería Eurochronos y la joyería Tiempo Global. Ojeda desempeñó el rol de apoyo en la fuga, transportando a los delincuentes y las joyas robadas.
Escapatoria y posterior captura
Tras el asalto, los miembros de la banda se dispersaron hacia diferentes países para no ser detectados. A pesar de sus intentos previos de ingresar a Colombia y otros países, Ojeda fue inadmitida por alertas migratorias. Sin embargo, utilizando un pasaporte distinto, intentó nuevamente ingresar a Colombia, con la intención de establecerse en el Valle del Cauca junto a su familia.
Gracias al trabajo de la INTERPOL Colombia, se logró su captura en Bogotá. Ojeda se encuentra ahora bajo custodia de la Fiscalía General de la Nación y enfrenta un proceso de extradición a Costa Rica, donde deberá responder por sus crímenes.
