La captura de Giuseppe Palermo, alias Peppe, representa uno de los golpes más contundentes de los últimos años contra el crimen organizado internacional en Colombia. Este italiano de 47 años, considerado el principal enlace de la mafia ‘Ndrangheta en América Latina, fue detenido en el norte de Bogotá tras una operación coordinada entre la Policía Nacional, Europol y autoridades del Reino Unido e Italia. Palermo, quien era buscado en 196 países mediante circular roja de Interpol, residía en la capital colombiana bajo un perfil bajo, pero rodeado de lujos y comodidades.
El prontuario de alias Peppe es extenso y revela la magnitud de sus operaciones. Según las autoridades, lideraba la compra de grandes cargamentos de cocaína en Colombia, Perú y Ecuador, negociando directamente con productores y transportadores locales. Su función principal era coordinar la logística y las rutas, tanto marítimas como terrestres, para el envío de droga hacia puertos europeos, consolidando a la ‘Ndrangheta como una de las organizaciones más poderosas del narcotráfico global.
La influencia de Palermo se extendía más allá del tráfico de estupefacientes. Investigaciones internacionales han documentado que la ‘Ndrangheta, bajo su liderazgo en la región, tejió alianzas estratégicas con organizaciones criminales locales, como el Clan del Golfo, y diversificó sus operaciones hacia el lavado de activos y la corrupción de funcionarios. Palermo era considerado uno de los miembros más herméticos y peligrosos de la mafia calabresa, capaz de mover millones de dólares en cargamentos ilegales y blanquear capitales a través de empresas fachada.
¡𝗖𝗔𝗬𝗢́ 𝗘𝗟 𝗠𝗔́𝗫𝗜𝗠𝗢 𝗖𝗔𝗕𝗘𝗖𝗜𝗟𝗟𝗔 𝗗𝗘 𝗠𝗔𝗙𝗜𝗔 𝗜𝗧𝗔𝗟𝗜𝗔𝗡𝗔 𝗘𝗡 𝗔𝗠𝗘́𝗥𝗜𝗖𝗔 𝗟𝗔𝗧𝗜𝗡𝗔! En Bogotá, en desarrollo de la ofensiva contra el multicrimen y el delito, la @PoliciaColombia , en coordinación con @Europol y autoridades del Reino Unido e… pic.twitter.com/pa3dZ2fn8g
— Mayor general Carlos Fernando Triana Beltrán (@DirectorPolicia) July 11, 2025
El operativo que permitió su captura fue el resultado de meses de inteligencia y vigilancia. Las autoridades lograron ubicarlo cuando salía de una tienda de abastos en el sector de Colina, en el norte de Bogotá. Palermo, quien llevaba una vida aparentemente tranquila y ostentosa, fue sorprendido por un grupo de agentes de fuerzas especiales fuertemente armados. Su detención se enmarca en una ofensiva internacional que, en paralelo, permitió la captura de más de veinte miembros de la ‘Ndrangheta en Europa.
La vida de lujos que llevaba alias Peppe en Bogotá contrastaba con la naturaleza clandestina de sus actividades. Fuentes policiales revelaron que frecuentaba restaurantes exclusivos, residía en apartamentos de alto nivel y mantenía un bajo perfil para evitar la atención de las autoridades. Sin embargo, su capacidad para coordinar operaciones transnacionales lo convirtió en un objetivo prioritario para las agencias de inteligencia de varios países.
Con la captura de Palermo, Colombia y sus aliados internacionales envían un mensaje claro sobre el compromiso en la lucha contra el crimen organizado. El proceso de extradición hacia Italia ya está en marcha, mientras las investigaciones continúan para desmantelar las redes que operaban bajo su mando. El caso de alias Peppe evidencia la sofisticación y alcance de las mafias europeas en América Latina, así como la necesidad de una cooperación global para enfrentar este flagelo.




