Las autoridades propinaron un fuerte golpe al microtráfico en el municipio de Yumbo, al lograr la captura de ocho integrantes de la estructura delincuencial conocida como ‘Los de la 10’, quienes mantenían bajo amenaza a los barrios Bellavista y La Ceiba con la venta de alucinógenos.
La operación policial se desarrolló en la madrugada del lunes 4 de agosto con un despliegue de más de 13 allanamientos simultáneos, en los que fueron capturadas cinco personas por orden judicial, otras dos en flagrancia, se hizo una imputación adicional y se aprehendió a una adolescente de 16 años que también integraba la banda.
De acuerdo con el reporte oficial, los capturados deberán responder por los delitos de concierto para delinquir, tráfico de estupefacientes y, en el caso de los mayores de edad, instrumentalización de menores para la comisión de delitos.
Entre los capturados se encuentra el cabecilla de la organización, alias ‘Vianky’, un joven de 23 años que, según las autoridades, era quien daba las órdenes y coordinaba el expendio. También fue detenido un ciudadano extranjero y una mujer que tenía medida de detención domiciliaria por el mismo delito.
Las labores de inteligencia se extendieron por seis meses, tiempo en el que se documentó cómo esta estructura afectaba la seguridad del sector, usando a niños y adolescentes para movilizar y vender droga, aprovechando su condición de vulnerabilidad y el difícil contexto social de los barrios intervenidos.
Durante los procedimientos se incautaron más de 3.000 dosis de estupefacientes, un arma de fuego traumática con tres cartuchos, y se evitó la comercialización de más de 15.000 dosis semanales, lo que representa la desarticulación de un negocio criminal que generaba ingresos ilícitos por más de 120 millones de pesos mensuales.
La captura de esta banda fue posible gracias al trabajo articulado entre la Policía Nacional, la Fiscalía General de la Nación y la colaboración de la ciudadanía, que denunció los constantes movimientos sospechosos en la zona.
Los detenidos fueron dejados a disposición de la Fiscalía. Un juez de control de garantías impuso medida de aseguramiento intramural a los capturados por orden judicial. Mientras tanto, los detenidos en flagrancia fueron dejados en libertad, pero seguirán vinculados al proceso judicial.
Este operativo se suma a las estrategias que adelanta la Policía para combatir el narcotráfico a pequeña escala, especialmente en zonas residenciales donde se busca proteger a la población infantil del flagelo de las drogas.
La comunidad celebró las capturas, aunque pidió mayor presencia institucional para evitar que estas estructuras criminales se regeneren con facilidad. “No queremos que desarticulen una banda y en un mes llegue otra”, dijo un líder barrial.
