El día viernes 14 de junio se dio a conocer una captura en la que estarían involucrados dos colombianos, uno de ellos tolimense oriundo del municipio de Chaparral, dicho sujeto responde al nombre de Waneider L. a quien se le logró incautar tres armas de fuego, entre las cuales hay un poderoso fusil Barrett calibre .50, capaz de derribar aeronaves, al igual que municiones y chalecos antibalas, Waneider fue capturado en compañía de Anderson Xavier O, de 34 años de edad igual que Waneider, este último proveniente de Pitalito.
Hechos
La captura de Waneider se logró gracias a una larga investigación y seguimiento al grupo al que harían parte, el operativo realizado en conjunto entre el Ejército Mexicano y la Guardia Civil de este mismo país. Según declaraciones de las autoridades que participaron en la acción, en la región en la que Waneider y Anderson fueron capturados, operan distintos grupos de delincuencia, por lo que se sospecha y presume que estos dos colombianos estarían en uno de esos grupos como mercenarios, esta conclusión es sacada de acuerdo al arsenal que se les logró incautar.
Cárteles
Por su parte, el estado mexicano ha estado en pronunciamiento en cuanto a este tema, por lo que se presume que, al parecer, algunos ex militares que son de nacionalidad colombiana; estarían viajando a dicho país para trabajar en diferentes tipos de actividades delictivas. El tipo de arma que se les incautó tanto al tolimense como a su compañero serían armas serían las perfectas para penetrar vehículos blindados, es uno de los preferidos por los cárteles de la droga, como se refiere en una demanda de 2021 presentada por México contra fabricantes de armas.
Exmilitares
Las autoridades continúan investigando el alcance de las operaciones de estos individuos y su conexión con otras actividades criminales en la región de Tierra Caliente, conocida por su alta incidencia de violencia y crimen organizado. Esto no es un hecho aislado, pues al inicio del conflicto Ucrania y Rusia, desde febrero del 2022, mediáticamente se ha conocido varios casos de ex militares colombianos que por voluntad propia han decidido ir a pelear a un conflicto ajeno. Para el 8 de junio la cancillería reportó por lo menos 51 de estos colombianos como muertos.



