De acuerdo con las autoridades, el sicario ingresó al establecimiento público alrededor de las siete de la noche, desenfundó su arma y atacó a la víctima con al menos seis disparos, infligiendo graves heridas. Tras consumar el crimen, el perpetrador huyó rápidamente de la escena, dejando tras de sí un ambiente cargado de consternación en la comunidad.
La captura
La rápida acción de los agentes de policía nacional de Bogotá resultó crucial, ya que los uniformados implementaron de inmediato un plan candado para asegurar la captura del presunto homicida. En el contexto del plan ‘Bogotá Camina Segura’, la Policía Nacional logró detener a un individuo masculino de aproximadamente 30 años de edad. Según informó a los medios de comunicación esta persona había perpetrado un homicidio minutos antes en un establecimiento abierto al público. Este arresto destaca la efectividad de la colaboración ciudadana y la respuesta coordinada de las fuerzas de seguridad para mantener la seguridad en la capital.
El otro homicidio
En el momento de la captura, se halló en posesión del detenido un arma de fuego calibre 38, constituyendo un elemento que respaldaría su presunta implicación en el asesinato. Esta evidencia condujo a vincularlo con otro incidente de sicariato ocurrido el sábado por la noche en un barrio cercano, al identificar similitudes con el arma encontrada. Debido a estos hallazgos, el individuo fue entregado a la Fiscalía General de la Nación para enfrentar las correspondientes acciones legales. La conexión con eventos anteriores destaca la importancia de una investigación integral para esclarecer y abordar de manera efectiva la violencia en la región.
