En un nuevo golpe contra el narcotráfico y las economías ilícitas que afectan al sur del país, la Policía Nacional incautó ocho toneladas de dióxido de manganeso, insumo químico altamente controlado utilizado en el procesamiento de alcaloides, especialmente cocaína y capturó al hombre que manejaba el vehículo en el que se transportaban . El procedimiento se llevó a cabo por unidades de la Seccional de Tránsito y Transporte del Departamento de Policía Nariño, como parte de los operativos de control sobre los corredores viales estratégicos de la región.
El hecho se registró en el kilómetro 51 de la vía Rumichaca – Pasto, a la altura del corregimiento El Pedregal, en jurisdicción del municipio de Imués, donde durante una inspección rutinaria, los uniformados detuvieron un camión que transportaba 160 bultos cubiertos con lona blanca, los cuales en su interior contenían bolsas plásticas con una sustancia pulverulenta de color negro. Tras realizar las pruebas preliminares y análisis físicos, se confirmó que se trataba de dióxido de manganeso, con un peso total de 8.000 kilogramos, es decir ocho toneladas.
Según lo dicho por las autoridades, este químico es considerado como un insumo esencial para el procesamiento de cocaína, por lo que su transporte, sin la debida autorización, constituye un delito penal en Colombia. Por esta razón, el conductor del vehículo fue capturado en flagrancia y puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación, por el delito de tráfico de sustancias para el procesamiento de narcóticos, contemplado en el artículo 376 del Código Penal Colombiano.
Las autoridades calificaron este resultado como un “duro golpe” a las estructuras criminales que operan en la región, ya que estas sustancias representan un alto valor en el mercado ilegal y son fundamentales para mantener activa la cadena de producción de estupefacientes en laboratorios clandestinos. Además, el decomiso de este tipo de insumos impacta directamente las finanzas de los grupos armados ilegales y organizaciones narcotraficantes que delinquen en Nariño y otras zonas del suroccidente colombiano.
Finalmente, la Policía Nacional reiteró su compromiso con la lucha frontal contra el narcotráfico, anunciando que se mantendrán los controles estratégicos y las operaciones de registro en las principales vías del departamento, con el objetivo de frenar el tráfico de drogas y sustancias químicas ilegales.


