El cantante de música popular Julián Daza vivió el pasado domingo uno de los momentos más angustiantes de su carrera. Mientras se dirigía al municipio de Palermo, Huila, para cumplir con una esperada presentación, una llanta de su vehículo explotó repentinamente cuando transitaban por una recta de la carretera. El hecho, que pudo terminar en tragedia, dejó al descubierto la fragilidad de la vida y el valor de la fe.
La pericia del conductor evitó lo peor
De acuerdo con el propio Julián, el estallido tomó por sorpresa a todos los ocupantes del automóvil, generando momentos de tensión. Sin embargo, la destreza del conductor fue clave para controlar la situación y evitar un accidente mayor. Gracias a esta rápida acción, no se presentaron heridos ni daños de gravedad. El vehículo, aunque quedó inmovilizado, fue trasladado en grúa.
“Dios nos dio otra oportunidad”
A pesar del susto y del contratiempo, Daza decidió no defraudar a su público. Una vez en Palermo, se presentó ante cientos de personas que lo esperaban con entusiasmo. Su llegada fue recibida con aplausos y emoción, especialmente luego de conocerse la historia del incidente en carretera.
Con voz entrecortada, el artista expresó al finalizar su concierto: “Cuando todo pudo acabar en un instante, Dios decidió darnos otra oportunidad. No tengo palabras, solo gratitud por seguir con vida”.
