La ministra de Relaciones Exteriores, Laura Sarabia, descalificó las acusaciones del excanciller Álvaro Leyva en contra del presidente Gustavo Petro, defendiendo la gestión del actual gobierno y rechazando las denuncias que atribuyó a una conspiración. La reacción de la funcionaria se da en medio de tensiones entre la ministra y el presidente Petro por la extensión del contrato para la elaboración de pasaportes con la firma Thomas & Greg, que el presidente ordenó reversar, pese a impedimentos jurídicos.
La red social X (antes Twitter) fue el escenario de la reacción de Sarabia, que se refirió, sin mencionarlas, a las denuncias expresadas a través de tres cartas del exministro en las que este ha acusado a Petro de padecer problemas de salud mental y adicciones que afectarían su desempeño presidencial.
Acerca de Sarabia, Leyva afirmó que Laura Sarabia era quien le administraba el tiempo y que era la encargada de “quehaceres” de la órbita más privada del mandatario.
En las misivas, además, Leyva refirió episodios como la desaparición temporal del mandatario en París y la cancelación abrupta de compromisos oficiales, interpretándolos como señales de una crisis interna grave en la Casa de Nariño. Además, advirtió sobre amenazas contra él y su familia, responsabilizando directamente al presidente por cualquier cosa que le pudiera pasar a él o sus allegados.
Sarabia, en su respuesta de este domingo, calificó las denuncias como infundadas y motivadas por intereses políticos que buscan desestabilizar la administración actual. Subrayó que el Gobierno mantiene un compromiso irrestricto con la transparencia y la institucionalidad, y que las afirmaciones de Leyva carecen de sustento probatorio.
La pelea por los pasaportes
El pronunciamiento de Laura Sarabia se da en paralelo a la controversia por la licitación para la expedición de pasaportes adjudicada a la empresa Thomas & Greg. Dicho contrato ha sido objeto de críticas por supuestas irregularidades y falta de transparencia, lo que ha generado cuestionamientos sobre la gestión administrativa durante el periodo en el que Leyva estuvo al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Por su gestión sobre el tema, Álvaro Leyva ha enfrentado problemas legales derivados de sus acciones como funcionario, incluyendo investigaciones que él mismo denuncia como persecución política.
