Los hechos violentos y sangrientos no cesan en el departamento del Cauca. En las últimas horas, las autoridades judiciales del municipio de Caloto confirmaron la muerte de un ciudadano, quien simplemente señalaron que correspondía al nombre de Brayan.
Lea aquí: Alcaldesa de Silvia, Cauca, posesionó a nuevos dirigentes del Pueblo Totoroez
Uno de los investigadores indicó de Caloto que todo sucedió en horas de la madrugada, cuando en las afueras de una reconocida discoteca ubicada en el barrio Las Palmas se formó una trifulca o pelea. Ante la difícil situación, al sitio llegaron integrantes de la Policía y Ejército Nacional, quienes tuvieron que utilizar gases lacrimógenos para disuadir a las personas y controlar la situación.
Personal de la Sijin en conjunto con integrantes de la Fiscalía General de la Nación fueron los encargados de llevar a cabo la inspección técnica del sitio y cadáver pero sin entregar mayores detalles de lo acontecido. La comunidad rechazó este acto violento y solicitó de manera enfática a los entes encargados de garantizar la seguridad y tranquilidad de las comunidades, implementar estrategias que ayuden a mejorar la calidad de vida y controlar las bandas delincuenciales o personas dedicadas a cometer todo tipo de crímenes.
El cuerpo fue dejado a disposición de los laboratorios de genética del Instituto Nacional de Medicina Legal donde los expertos forenses adelantaron la tipificación molecular y el cotejo de perfiles genéticos, con miras a establecer la plena identidad de la víctima y las causas de su muerte. Uno de los funcionarios confirmó que se trataba del joven Brayan Alexis Ortiz Rodríguez. Los móviles y autores del crimen son materia de investigación por el delito de homicidio agravado.
Cabe indicar que Caloto es una localidad donde se han presentado una serie de asesinatos sin que hasta el momento estos hayan sido esclarecidos. Según las autoridades, en esta región hace presencia el Grupo Armado Organizado Residual de las Farc, Sexto Frente y la columna Jacobo Arenas. “El frente Jacobo Arenas, acostumbra a interrumpir la calma, sacudir a la fuerza pública y desaparecer en medio de las espesas montañas que rodean el casco urbano”, indicó uno de los ciudadanos.
Otros líderes señalaron: “Las autoridades creen que tienen el control en Caloto. Al menos, vigilan la zona urbana del pueblo porque en los alrededores de la montaña, es casi imposible. La guerrilla se mueve como pez en el agua y sorprende cuando menos se piensa. La razón de estos hechos de inseguridad tiene que ver con el control de cultivos ilícitos”.



