La ola de violencia en Buenaventura ha encendido nuevamente las alarmas, con un saldo de 11
homicidios en el mes de enero. Estos crímenes, muchos de ellos atribuidos a grupos
delincuenciales organizados como “Los Espartanos”, han desbordado la seguridad en la ciudad. La
violencia se ha intensificado debido al control territorial que ejercen estas organizaciones, las
cuales, a través de extorsiones y ajustes de cuentas, han mantenido a la población en constante
zozobra.
“Los Espartanos” han sembrado el miedo en las comunas de Buenaventura, ejerciendo un control
en áreas estratégicas y sometiendo a la población mediante amenazas y cobros ilegales. Los
comerciantes, en particular, son víctimas de extorsiones, lo que afecta gravemente la economía
local y crea un ambiente de inseguridad generalizada. La disputa entre estos grupos por el control
del territorio ha incrementado los niveles de violencia en la ciudad, afectando a cientos de familias
que se sienten atrapadas entre los enfrentamientos de estas bandas.
Avances
En medio de esta crisis, las autoridades lograron un avance significativo en la lucha contra el
crimen organizado con la captura de Víctor Alfonso Aragón Riascos, alias «Víctor», miembro clave
de la estructura criminal de “Los Espartanos”. La operación fue realizada de manera conjunta por
el Gaula Militar y el CTI de la Fiscalía, siguiendo una orden judicial emitida por el Juzgado Sexto
Penal Municipal con función de control de garantías de Buenaventura.
Alias «Víctor» tenía un papel fundamental dentro de la organización criminal, ya que manejaba las
finanzas del grupo y estaba a cargo de coordinar extorsiones a comerciantes locales, además de
liderar una serie de homicidios selectivos que sembraban el terror en la ciudad. Su influencia
dentro de “Los Espartanos” lo posicionaba como una figura clave en las actividades ilícitas que han
desestabilizado la región.
Soborno
Durante el operativo, «Víctor» intentó sobornar a los oficiales que participaron en su captura,
ofreciendo una suma de 100 millones de pesos a cambio de su libertad. Sin embargo, las
autoridades lograron llevar a cabo la detención sin ceder a la oferta de soborno. Actualmente,
«Víctor» se encuentra bajo medida de aseguramiento intramural mientras avanza el proceso
judicial en su contra. Está siendo investigado por los delitos de homicidio agravado, porte ilegal de
armas y asociación para delinquir.
A pesar de este golpe al crimen organizado, las autoridades han señalado que la violencia en
Buenaventura persiste, alimentada por la aparición de nuevos grupos armados que luchan por el
control del territorio. Las autoridades locales y nacionales han reiterado su compromiso de
continuar enfrentando la criminalidad, pero muchos expertos aseguran que el problema de fondo
en Buenaventura está relacionado con las condiciones sociales y económicas de la región. La
situación exige una solución integral que no solo apunte a la captura de cabecillas, sino también a
la atención de las causas estructurales de la violencia.
