Redes colapsan con desinformación tras alerta de tsunami: expertos alertan sobre bulos

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Durante los últimos días de julio de 2025, las redes sociales se vieron invadidas por una ola de desinformación a raíz del fuerte sismo de magnitud 8.8 registrado en la península de Kamchatka, Rusia. Aunque las autoridades emitieron alertas preventivas de tsunami para diversas regiones del Pacífico, muchas publicaciones virales en TikTok, X (antes Twitter), Instagram y Facebook difundieron videos antiguos y fuera de contexto, generando confusión y miedo colectivo.

Uno de los videos más compartidos mostraba a pescadores huyendo a toda velocidad en un bote tras lo que parecía ser una enorme ola acercándose. Aunque el clip fue presentado como una grabación real posterior al terremoto, se comprobó que corresponde a un suceso totalmente distinto ocurrido años atrás en el sudeste asiático. De igual manera, otro material que mostraba ballenas varadas en la costa circuló con la afirmación de que era una consecuencia directa del tsunami, pero este fue grabado en Chile en 2019.

Estos contenidos fueron replicados por miles de usuarios, incluidos algunos influencers, sin verificación previa. La viralización alcanzó millones de visualizaciones en pocas horas, lo cual obligó a medios internacionales y plataformas de verificación a actuar rápidamente. El equipo de Maldita.es en España, AFP Factual y Chequeado en América Latina desmintieron gran parte de estos materiales.

Lo preocupante, según expertos en comunicación digital, es que este tipo de bulos no solo desinforman, sino que pueden poner en riesgo la seguridad de las personas. Por ejemplo, ciudadanos de algunas zonas costeras de México y Perú reportaron haber abandonado sus viviendas de forma abrupta por temor a un supuesto tsunami inminente, impulsados únicamente por los videos circulantes en redes.

El fenómeno también volvió a encender el debate sobre el papel de las redes sociales como canales de información en situaciones de emergencia. Aunque plataformas como X y Facebook han implementado etiquetas y advertencias de “contenido dudoso”, estos filtros siguen siendo insuficientes frente a la velocidad de difusión de un bulo.

Por su parte, las autoridades meteorológicas y de gestión de desastres hicieron un llamado a la ciudadanía para que consulten siempre fuentes oficiales, como el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC) o sus entidades locales.

La desinformación durante crisis no es nueva, pero la rapidez con la que se movieron estos contenidos vuelve a demostrar la necesidad de educación digital, pensamiento crítico y responsabilidad informativa, tanto de usuarios como de creadores de contenido.


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