Miguel Uribe sufrió muerte cerebral y un milagro lo regresó a la vida, asegura su esposa, María Claudia Tarazona, en entrevista con Los Informantes

El senador y precandidato presidencial Miguel Uribe vivió un milagro en la Fundación Santa Fe de Bogotá: tras ser víctima de un atentado sicarial y ser declarado con muerte cerebral, sorprendió a médicos, familiares y al país entero al recuperarse inesperadamente, según relató su esposa María Claudia Tarazona en una emotiva entrevista. El caso conmueve a Colombia y abre un debate sobre la esperanza y la fe frente a la adversidad.
Miguel Uribe Turbay y María Claudia Tarazona
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El senador y precandidato presidencial Miguel Uribe, víctima de un atentado sicarial en el occidente de Bogotá el pasado 7 de junio, tuvo muerte cerebral, pero un milagro lo devolvió a la vida, aseguró su esposa, maría Claudia Tarazona, en entrevista con Los Informantes de Caracol Televisión.

En un desgarrado relato, Tarazona narró que en las primeras 48 horas después del atentado, tras sobrevivir a una cirugía, un médico le dio la devastadora noticia.

“Llegamos y operan a Miguel y nos dicen, ‘Miguel sobrevivió a la operación’. Fue pues obviamente un alivio, pero en algún momento yo subí a cuidados intensivos y unos médicos me dijeron: ‘Miguel, entró en muerte cerebral’.  Entonces yo dije, ‘¿Qué significa eso?’’, y me volteé y miré otro médico y le pregunté, ‘¿Miguel, se va a morir?’, y me dijeron que sí. Le dije, ‘¿Qué tantas horas tengo?’. Entonces me dijeron: ‘Es cuestión de horas’”, narró la esposa de Miguel Uribe.

Con el corazón en la mano, María Claudia Tarazona fue con sus hijas y les pidió que le grabaran un mensaje a modo de cierre, después se recostó en pecho de su esposo y le prometió cuidar a su bebé, Alejandro.

“Entro a despedirme de Miguel, me acuesto encima de él y le digo: ‘Amor lindo, hiciste un trabajo maravilloso, no solamente en nuestra familia, con nuestro hijo, con las niñas, conmigo, con tu papá, sino hiciste un trabajo maravilloso en Colombia y vete tranquilo que mi promesa es que voy a estar aquí para Alejandro, que es tu mayor tesoro, lo voy a cuidar con todas las fuerzas de mi corazón. Y cuando Alejandro tenga hijos y sus hijos tengan hijos y esos hijos vayan a tener hijos, te voy a ir a buscar y va a haber una segunda oportunidad para ti y para mí. vete a buscar los brazos de tu papá que yo me hago cargo”, agregó.

Después, vino el momento más duro, contarle a su hijo Alejandro, de cuatro años, lo sucedido. “Entonces él se me tiró encima y me abrazó y me dijo, ‘¿Por qué, mamá? ¿Por qué a mi papá?’”.

Cumplido el doloroso proceso, dispuesta ya a despedirse de su esposo, Tarazona regresó a la clínica Fundación Santa Fe de Bogotá, sin siquiera imaginar lo que había sucedido en su ausencia.

“Me devolví para la clínica y cuando llegué me dice el doctor [Fernando] Hakin: «Es otro paciente, otro cerebro, Miguel se está recuperando”.

“Nada te humaniza más que el dolor, pero tampoco nada te humaniza más y te acerca a Dios que el dolor. Entonces, el dolor en sí mismo es un regalo. solo aceptando radicalmente el dolor y aceptando radicalmente lo que me está pasando. Puedo ver cosas maravillosas y puedo ver pequeños milagros, no solo en Miguel, sino en la vida de mis hijos, en Alejandro, en la gente que está alrededor mío, en el amor que recibo”, agregó Tarazona.

Vea la entrevista completa de Los Informantes de Caracol Televisión aquí:


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