Los hechos de sangre no cesan en el municipio de Bolívar, sur del Cauca. El número de muertos en menos de 48 horas asciende a tres. El incidente más reciente, según el informe de los entes competentes se presentó en horas de la tarde en la vereda La Chorrera, corregimiento de Los Rastrojos.
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Uno de los funcionarios judiciales indicó que, en dicho lugar perteneciente a Bolívar, varios agricultores, los cuales se encontraban realizando sus labores diarias, encontraron el cadáver a un costado de la vía. Conocida la situación, reportaron el caso para que los entes competentes se apersonaran de la trágica situación.
Debido a que la zona es de alto riesgo para las unidades policiales, personal de la Defensa Civil en medio de una labor humanitaria, se desplazó hasta el sitio para trasladar el cuerpo hasta las instalaciones de la morgue del hospital local, donde funcionarios de actos urgentes de la Sijin se encargaron de llevar a cabo la inspección técnica.
En los procedimientos legales lograron establecer que se trataba de Diego Andrés Zúñiga Rodríguez de 33 años de edad, quien registraba heridas en distintas partes del cuerpo ocasionadas por arma de fuego. Uno de los peritos indicó que la víctima tenía disparos en la cabeza con afectaciones en la región parietal y occipital; además de un tiro en la región del pecho.
Concluidas las diligencias, expertos en Ciencias Forenses realizaron la necropsia para determinar las verdaderas causas de su deceso. La fiscalía general de la Nación inició las investigaciones para esclarecer las causas y motivos del crimen. Entre tanto, la comunidad se mostró indignada ante el incremento de hechos violentos los cuales vienen generando todo tipo de temores.
Cabe indicar que, a este hecho sangriento, se le suma el ocurrido en la vereda Los Azules donde fueron asesinados Ángel Alberto Vanegas Solarte y Luis Fernando Velasco Torres. Se espera que las autoridades encargadas de garantizar la tranquilidad y seguridad de las personas, implementen las estrategias necesarias para evitar que sigan ocurriendo más derramamientos de sangre.
