Boca Juniors dominó pero dejó escapar la victoria en La Bombonera

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Boca Juniors igualó 2-2 frente a Central Córdoba en un partido donde el equipo de Miguel Ángel Russo fue claramente superior en números y propuesta, pero no logró sostener la ventaja en el marcador. La Bombonera fue testigo de un choque intenso en el que los locales controlaron las acciones, aunque terminaron pagando caro las desatenciones defensivas.

Los goles de Rodrigo Battaglia a los 41 minutos y de Miguel Merentiel a los 56 parecían encaminar a Boca hacia un triunfo cómodo. Sin embargo, la reacción del rival sorprendió y dejó a Russo con la preocupación de que su equipo, pese a dominar de principio a fin, no pudo cerrar el partido con la solidez que requería.

Las estadísticas respaldan el dominio absoluto de Boca. El conjunto xeneize realizó 24 remates, de los cuales 8 fueron directos al arco, frente a apenas 9 intentos de Central Córdoba y solo 2 que exigieron al portero. A nivel de posesión, los de Russo alcanzaron el 63%, moviendo la pelota con paciencia y buscando los espacios.

Ese control se reflejó también en la circulación del balón: Boca completó 551 pases con un 84% de precisión, mostrando una clara superioridad en la construcción del juego. En contraste, el rival apenas llegó a 330 toques con un 77% de efectividad, lo que marca la distancia en la propuesta de ambos equipos.

Otro dato que refleja la diferencia fue la disciplina en la cancha. Boca solo cometió 7 faltas en todo el encuentro, mientras que Central Córdoba registró 23, una muestra de que el visitante debió recurrir al corte constante para frenar el avance xeneize. Incluso en las amonestaciones, Boca recibió solo dos tarjetas amarillas frente a las cuatro del rival.

En las pelotas quietas, Boca también fue protagonista, consiguiendo 12 tiros de esquina contra apenas 4 de la visita. Sin embargo, la falta de efectividad en la definición y algunos descuidos en defensa impidieron que esos números se tradujeran en un triunfo.

Para Russo, el empate deja un sabor amargo: Boca mostró personalidad, volumen de juego y estadísticas que lo avalan como dominador absoluto, pero una vez más la falta de contundencia en los momentos clave terminó pasándole factura. El equipo deberá ajustar en la concentración defensiva si quiere que su dominio se refleje con victorias claras en el marcador.


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