Comunidades del norte del Cauca protestan por el deterioro vial, la inseguridad y el incumplimiento de promesas oficiales.
Protesta
Desde las primeras horas del día, habitantes de los municipios de Puerto Tejada y Padilla, en el norte del departamento del Cauca, iniciaron un bloqueo en la vía que conecta a Villa Rica con Jamundí, en el Valle del Cauca. Esta acción hace parte de una protesta ciudadana contra lo que consideran un abandono por parte del Gobierno nacional y departamental. Los manifestantes argumentan que llevan años exigiendo mejoras en la infraestructura vial sin obtener respuestas concretas. Las condiciones de la carretera Puerto Tejada – Hormiguero son críticas: la vía carece de iluminación, señalización y mantenimiento, lo que ha causado numerosos accidentes de tránsito, problemas de seguridad y hasta la pérdida de vidas humanas.
Retrasos
Uno de los reclamos más fuertes de la comunidad es la demora en la ejecución del proyecto de pavimentación entre Puerto Tejada y Padilla. Según los líderes de la protesta, esta obra fue anunciada por la Gobernación del Cauca en reiteradas ocasiones, pero hasta el momento no se ha iniciado ninguna intervención significativa. La falta de avance ha sido interpretada por los ciudadanos como una muestra de desinterés por parte de las autoridades, lo cual ha generado un creciente malestar entre quienes a diario deben enfrentar las consecuencias de transitar por vías en mal estado. Los voceros aseguran que esta situación también afecta el desarrollo económico de la región y pone en riesgo la seguridad de sus habitantes.
Jamundí
Paralelamente, en la zona rural de Jamundí, en el corregimiento de Bocas del Palo, otro grupo de manifestantes bloquea el paso vehicular a la altura del Puente Valencia. Aunque se permite el tránsito de ambulancias, el resto de vehículos permanece detenido como parte de la jornada de movilización. Los habitantes de esta zona también reclaman atención estatal para sus necesidades básicas, y han utilizado pancartas y consignas para llamar la atención de las autoridades sobre la falta de inversión y los problemas estructurales que padecen desde hace años. La comunidad exige diálogo y soluciones inmediatas, asegurando que no levantarán el bloqueo hasta obtener compromisos firmes.
Impacto
La consecuencia inmediata de estas movilizaciones es la interrupción total de la comunicación terrestre entre Popayán y Cali, una de las rutas más importantes del suroccidente colombiano. El bloqueo afecta no solo el transporte de pasajeros, sino también la circulación de mercancías, productos agrícolas y servicios esenciales. Empresas transportadoras, viajeros y habitantes de ambas ciudades se han visto obligados a buscar rutas alternas, que en muchos casos no están habilitadas o son inseguras. La situación ha generado preocupación entre distintos sectores, y se espera que las autoridades respondan con prontitud para evitar una mayor afectación a la economía y la movilidad regional.



