En una entrevista reciente con Financial Times, el filántropo y cofundador de Microsoft, Bill Gates, arremetió contra Elon Musk, acusándolo de “matar a niños pobres” tras los recortes impulsados por el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de EE. UU., bajo la dirección del empresario sudafricano. Gates señaló que estas decisiones han paralizado programas clave de ayuda internacional, incluida la entrega de alimentos, medicamentos y asistencia sanitaria en zonas vulnerables del mundo, lo que podría facilitar el resurgimiento de enfermedades como el sarampión, la poliomielitis y el VIH.
La controversia se agravó tras una orden ejecutiva del expresidente Donald Trump en febrero de 2023 que llevó al cierre de la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional (USAID). Musk defendió los recortes alegando ineficiencia y sesgo político en la agencia. Gates, sin embargo, denunció que estas medidas afectan directamente a millones de personas y citó como ejemplo la suspensión del financiamiento a un hospital en Gaza destinado a prevenir la transmisión maternoinfantil del VIH. Paralelamente, Gates reafirmó su compromiso de donar el 99 % de su fortuna, estimada en más de 200.000 millones de dólares, a través de la Fundación Gates, con el objetivo de abordar desafíos globales en salud, educación y desarrollo, especialmente en regiones como América Latina. También hizo un llamado a los multimillonarios para aumentar su contribución a causas humanitarias y abogó por una mayor tributación a las grandes fortunas.
