El ministro del Interior, Armando Benedetti, ofreció disculpas públicas a la magistrada de la Corte Suprema de Justicia, Cristina Lombana, luego de los insultos que lanzó contra ella tras el allanamiento a una de sus propiedades.
A través de su cuenta de X, el ministro escribió:
“He dicho cosas que no debí decir, me dejé llevar por la ira y la situación, y eso no refleja quién quiero ser. Lamento haber dicho lo que dije, le pido excusas a la señora Cristina Lombana”.
Benedetti aclaró, sin embargo, que sus disculpas no significan que renuncie a las denuncias que ha presentado contra la magistrada. “Esto no quiere decir que no siga denunciando las extralimitaciones y su abuso de poder contra mí y mi familia”, agregó.
Las declaraciones que desataron la polémica
El pronunciamiento se conoció luego de la controversia generada por sus afirmaciones en una entrevista con La W Radio, en la que Benedetti calificó a Lombana de “loca”, “demente” y “delincuente”, tras el procedimiento judicial adelantado en su residencia.
Visiblemente alterado, el ministro aseguró que la magistrada no tiene competencia para investigarlo y la acusó de actuar ilegalmente. “Tengo una magistrada, la señora Cristina Lombana, que está loca, demente y es una delincuente hasta mandar allanar hoy mi casa”, dijo durante la entrevista.
Argumentos del ministro sobre el allanamiento
Benedetti afirmó que el procedimiento judicial carece de sustento legal, pues ya no ostenta la calidad de congresista desde 2022, por lo que, según él, la Corte Suprema de Justicia no tiene competencia para adelantar investigaciones en su contra.
“Yo fui senador hasta 2022. Ella me trata como si fuera congresista y me investiga por hechos de 2023, 2024 y 2025. Eso es prevaricato”, señaló.
Además, acusó a Lombana de mantener una “persecución personal” en su contra desde hace siete años, que —según el ministro— también involucra a su círculo familiar.
El presidente Gustavo Petro también cuestionó el allanamiento, calificándolo como “ilegal” y señalando que el procedimiento “se transforma en secuestro”.
La polémica continúa mientras el alto funcionario enfrenta las consecuencias de sus declaraciones y el proceso judicial sigue su curso en la Corte Suprema de Justicia.
