Barcelona se convirtió hoy en el epicentro del diálogo cultural internacional al inaugurar el Ágora Cívica, un espacio abierto a la ciudadanía en el marco de la cumbre de políticas culturales de la UNESCO. La iniciativa busca dar voz a artistas, colectivos culturales y ciudadanos para debatir sobre los grandes retos que enfrenta el sector.
En este nuevo espacio se abordarán temas clave como la defensa de los derechos culturales, la diversidad lingüística y la cultura digital, en un escenario en el que la globalización y la tecnología están transformando la manera en que se produce y se consume arte.
La apertura del Ágora Cívica representa un paso hacia la democratización de la cultura, fomentando la participación activa de la sociedad en la construcción de políticas inclusivas y sostenibles. Además, se espera que funcione como un puente entre gobiernos, organizaciones culturales y ciudadanos, para garantizar que la cultura siga siendo un motor de identidad, innovación y cohesión social.

